lunes, 18 de febrero de 2008

Recomendación del mes:


Ensayo sobre lamelancolia.
Regresa, con nuevo elenco, una temporada mas de esta excelente obra
dirigida y escrita por Alberto Villarreal Díaz


La melancolía, es un estado anímico de depresión sin causa específica. Se caracteriza por la falta de entusiasmo y predisposición a la actividad en general. Fue reconocida primero como una enfermedad en los siglos V y IV antes de Cristo, detallada en los fragmentos hipocráticos. Consistía en la “aversión a los alimentos; abatimiento; insomnio; irritabilidad e intranquilidad”, causada por “la acción residual de la pena y el miedo.” Hoy en día se cree que lo que se denominaba melancolía es en realidad lo que nosotros llamamos depresión clínica. Llevar todo esto a una puesta en escena sin duda, es todo un reto, un reto digno de un experimentado grupo de actores.

Llego temprano, pues escuche mil recomendaciones de esa obra, entro a un lugar que no por nada es llamado La Madriguera, los espectadores nos acomodamos en los improvisados asientos; la acción se desarrolla en el Carlitos Café, un lugar con problemas que está en riesgo de dejar de existir; una serie de personajes descontextualizados kitsh desfilan ante mis ojos exponiéndome sus problemas personales, problemas cotidianos en los que, a veces en tono fársico, a veces en drama, se realiza un recorrido por las más íntimas emociones del espectador que, inevitablemente, se verá involucrado en lo presentado. Una mujer gorda que le da toda la vuelta a lo que significa ser gorda frente a lo que significa ser flaca. Allí enfrente de mi contándome todos los apodos que tuvo en su infancia, el ser mas vulnerable que pueda existir se hace presente ante nosotros, sus apodos son realmente cómicos, mas no me puedo reír, no ante alguien tan afectado que te lo comparte, todo un reto al espectador. A mi derecha las puertas se abren, un pollo desplumado le pide permiso al pollero de despedirse de Karen, una exuberante gallina con diabetes anteriormente presentada. El pollo manejado cual títere por un personaje de fina etiqueta, al final el pollero regresa, libran una batalla a muerte con cuchillos, que termina en el decapita miento del pollo ante la presencia de la perturbada Karen. Deambula por ahí también el fantasma de una niña ahogada que hace apariciones esporádicas para dejarse ver. La dueña del Carlitos Cafe nos declama un poema de despedida que alguien le enseñó, diciéndonos, entre otras cosas: “una a una me como las letras”. Más tarde, un joven nos entretendrá con el chiste de las tres Carmelitas descalzas.

Nos comentan que hoy es el cumpleaños del Carlitos Café y deciden celebrarlo, cantándole las tradicionales mañanitas y con un enorme pastel del que saldrá la chica gorda vestida como quinceañera, los demás le dicen que está linda la niña , orillándola a suplicar “no me vean la panza, véanme los codos, allí se ve más el hueso” o “agárrenme la tristeza como pueden agarrarme la gordura de las manos”. Mientras tanto, nos relatan la historia completa del Carlitos Café, desde sus inicios cuando formaba parte del estudio fotográfico que se encuentra en la planta baja. La dueña del café, elegantemente vestida, desea saber qué destino tendrá su local y no deja de preguntar “¿cuál será el futuro del Carlitos Café?”. En una relación intertextual hacen alusión al I-Ching y a la Ouija. Qué mejor forma de saber qué le espera al Carlitos Café que leyendo el I-Ching que es una práctica china utilizada como oráculo, o bien, consultando la Ouija. Sin embargo, olvidaron llevar las barajas del I-Ching y de la Ouija sólo encontraron el indicador, mas no la tabla.

Son las escenas que más recuerdo, más memorables. Pienso que el éxito de la puesta en escena es que en la propuesta actoral se privilegia la reflexión personal sobre la narrativa expuesta por el autor. Al final todos lloraban pues su miseria humana fue expuesta. Lo sabroso es el final: Encuentra la pluralidad en cada uno de los espectadores que, desde sus propias circunstancias de vida argumentará y pondrán la conclusión de este montaje rico en propuesta literaria y actoral.


 
Escrita y dirigida: Alberto Villarreal Díaz.
 La Madriguera
Álvaro Obregón 291-B Col. Roma
Viernes, 20:30 horas. Del 8 de febrero al 5 de diciembre
$ 100.00*



No hay comentarios:

Publicar un comentario